Fuente: http://kidshealth.org/parent/en_espanol/general/familias_bilingues.html (Ir a la versión en inglés)
Actualizado y revisado por: Carlos D. Rosé, MD
Fecha de revisión: agosto de 2011
En muchos países, no es nada inusual que los niños aprendan a hablar dos o más idiomas y que los utilicen a diario para comunicarse y entender a los que están a su alrededor. En muchos países del mundo la gente es bilingüe o plurilingüe sin ser consciente de ello. Y algunos niños crecen en lugares donde habitualmente se hablan cuatro o más idiomas.
En países como los Estados Unidos, puede haber un idioma que sea el dominante, es decir, el utilizado por el gobierno, las escuelas y la sociedad. Teniendo esto presente, los padres que hablan otro idioma por "herencia cultural" podrían enfrentarse a un dilema: ¿Deberíamos enseñar a nuestros hijos sólo el idioma dominante o deberíamos intentar que sean bilingües? Aunque es importante aprender el idioma imperante del país donde se vive, para muchas personas también es importante que sus hijos aprendan el idioma de sus padres, abuelos y hermanos mayores.
Enseñar o no a su hijo más de un idioma sólo depende de usted. Quizás crea que su hijo necesita empezar "de cero" en un nuevo país y sólo deba aprender el idioma predominante. Sin embargo, existen ciertas ventajas a la hora de educar a un niño para que sea bilingüe.
¿Qué significa ser bilingüe?
Ser bilingüe significa que usted puede entender y comunicarse en dos idiomas, así como expresar sus pensamientos de manera clara en ambos idiomas. Ser plurilingüe significa, por supuesto, que puede desarrollar dichas habilidades en más de dos idiomas.
¿Cuáles son las ventajas de ser bilingüe?
Algunos estudios sostienen que los niños expuestos a varios idiomas son más creativos y desarrollan mejor las habilidades de resolución de problemas. Otros estudios sugieren que hablar un segundo idioma, aunque sólo sea durante los primeros años de vida, ayuda a programar los circuitos cerebrales para que sea más fácil para el niño aprender más idiomas en un futuro.
Algunos expertos afirman que si padres e hijos no hablan el mismo idioma en casa, la comunicación entre ellos podría debilitarse. El resultado: los padres podrían perder cierto control sobre sus hijos y, con el tiempo, éstos podrían recurrir a influencias negativas, como las patotas, para recuperar el sentido de pertenencia que ya no sienten en casa.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a ser bilingüe?
Existen varios métodos que pueden ayudarle a lograr que su hijo sea bilingüe. En todos ellos, es muy importante que los niños estén expuestos a ambos idiomas en diversos contextos y que entiendan la importancia de conocer cada uno de ellos.
Se recomiendan dos enfoques:
Con cualquiera de los métodos que utilice, trate de no mezclar los dos idiomas. Es decir, cuando hable con su hijo en el idioma de su herencia cultural, no mezcle el inglés en frases ni oraciones. Sin embargo, no se sorprenda si su hijo utiliza palabras de ambos idiomas en una oración. Cuando esto suceda, corríjale con indiferencia proporcionándole la palabra adecuada en el idioma que estén usando.
Existen muchos materiales que pueden ayudar a su hijo a aprender un segundo idioma. Estos son: CD-ROMs para la enseñanza de idiomas, videojuegos, videos y DVDs, CDs de música y muñecos electrónicos, entre otros. Los libros bilingües y los programas de dibujos animados en español como Clifford, el gran perro colorado, y Dora, la exploradora también son fáciles de encontrar. Y, claro, siempre está la Internet.
Cuando exponga a su hijo a un segundo idioma, no se olvide de sus aficiones. Por ejemplo, si a su hijo le gusta el fútbol, vean un partido en uno de los canales de habla hispana. Si a su hijo le gusta la música, busquen los últimos CDs de artistas que canten en inglés y en su idioma nativo.
Para niños pequeños, recurra a las rimas, canciones y juegos de su infancia. A medida que sus hijos crecen, sea persistente y creativo en su enfoque. Algunos padres envían a sus hijos a escuelas de idiomas para que aprendan la lengua de una manera más formal. Muchas familias también optan por enviar a sus hijos a pasar más tiempo con sus parientes en su tierra natal, ya sea sólo durante el verano o por más tiempo. No olvide que es importante tener amigos que también hablen un idioma por herencia cultural.
¿El bilingüismo conducirá a una pérdida cultural?
Probablemente se perderá algo de cultura y algunos vínculos si su hijo crece en un nuevo país; sin embargo, usted decide si quiere inculcar a sus hijos su herencia cultural o no.
Definitivamente, existe una cultura "americana". Sin embargo, no olvide que durante siglos, muchas de las personas que llegaron a los Estados Unidos en busca de un futuro más prometedor se aferraron a sus lenguas y culturas nativas en sus hogares y barrios; no obstante, aprendieron a hablar inglés y a integrarse en la vida estadounidense. Dichas identidades culturales aún existen en muchas familias después de muchas, muchas generaciones. Por ejemplo, encontramos un barrio italiano o chino en casi todas las ciudades principales de Estados Unidos. Y cada año, se celebran Mardi Gras, el Cinco de Mayo y el Día de San Patricio con igual entusiasmo.
Hablar con fluidez un segundo idioma puede conllevar grandes beneficios culturales. Los niños que aprenden el idioma de su herencia cultural pueden comunicarse con sus parientes y fortalecer los lazos familiares al otro lado de la frontera. Además, es muy probable que quieran aprender la historia y las tradiciones del país natal de su familia. Comprender de dónde proceden ayuda a los niños a desarrollar una fuerte identidad y a determinar hacia dónde se dirigirán en el futuro.
¿Retrasa el bilingüismo el desarrollo del habla de un niño?
En algunos casos, aprender dos idiomas simultáneamente puede enlentecer el desarrollo del lenguaje, en comparación con los niños monolingües. Los lingüistas afirman que los niños bilingües pueden invertir el orden de las palabras de una oración, pero al igual que los niños que hablan un solo idioma, entenderán lo que quieren decir. Asimismo, la corrección siempre debe ser sutil para que el niño no se inhiba.
Algunos padres temen que hablar a sus hijos en otro idioma dificultará el aprendizaje del inglés en la escuela. La realidad es que antes de que vayan a la escuela, los niños ya habrán estado en continuo contacto con el inglés gracias a la televisión, la radio y sus amigos. Los padres suelen asombrarse de la habilidad que tienen sus hijos para aprender inglés cuando juegan con otros niños angloparlantes en el barrio o en el preescolar. Una vez que comienzan a ir a la escuela, se ponen al nivel de sus compañeros rápidamente. Es entonces cuando el problema para los padres pasa a ser ¡cómo evitar que sus hijos hablen sólo inglés!
¿Cuáles son algunos de los retos?
Quizás a algunos chicos no les entusiasma mucho la idea de hablar el idioma de sus padres. Por naturaleza, los niños quieren ser como sus compañeros. Por ejemplo, si sus amigos hablan sólo inglés, ellos también quieren hablar sólo inglés. Los padres que quieren que sus hijos hablen un segundo idioma deben continuar hablándolo en casa, independientemente de la resistencia que puedan encontrar en sus hijos.
Educar a un niño para que sea bilingüe
Enseñar un segundo idioma a un niño puede suponer un reto. La realidad es que la mayoría de las familias inmigrantes pierden su idioma nativo en la tercera generación; pero éste no tiene por qué ser su caso.
En última instancia, la fluidez que tenga su hijo al hablar otro idioma estará influenciada por muchos factores, incluida la motivación personal y el apoyo por parte de los padres. Decida qué nivel desea que tenga su hijo del idioma de su herencia cultural y luego busque los recursos apropiados, como libros y material multimedia, educación formal o inmersión temporal.
Enseñar a los niños a ser bilingües puede ayudarles a reconocer la importancia de su cultura y herencia, así como a desarrollar una fuerte identidad personal e, incluso, ¡puede serles de gran utilidad en el trabajo cuando sean mayores!
Actualizado y revisado por: Carlos D. Rosé, MD
Fecha de revisión: agosto de 2011
En muchos países, no es nada inusual que los niños aprendan a hablar dos o más idiomas y que los utilicen a diario para comunicarse y entender a los que están a su alrededor. En muchos países del mundo la gente es bilingüe o plurilingüe sin ser consciente de ello. Y algunos niños crecen en lugares donde habitualmente se hablan cuatro o más idiomas.
En países como los Estados Unidos, puede haber un idioma que sea el dominante, es decir, el utilizado por el gobierno, las escuelas y la sociedad. Teniendo esto presente, los padres que hablan otro idioma por "herencia cultural" podrían enfrentarse a un dilema: ¿Deberíamos enseñar a nuestros hijos sólo el idioma dominante o deberíamos intentar que sean bilingües? Aunque es importante aprender el idioma imperante del país donde se vive, para muchas personas también es importante que sus hijos aprendan el idioma de sus padres, abuelos y hermanos mayores.
Enseñar o no a su hijo más de un idioma sólo depende de usted. Quizás crea que su hijo necesita empezar "de cero" en un nuevo país y sólo deba aprender el idioma predominante. Sin embargo, existen ciertas ventajas a la hora de educar a un niño para que sea bilingüe.
¿Qué significa ser bilingüe?
Ser bilingüe significa que usted puede entender y comunicarse en dos idiomas, así como expresar sus pensamientos de manera clara en ambos idiomas. Ser plurilingüe significa, por supuesto, que puede desarrollar dichas habilidades en más de dos idiomas.
¿Cuáles son las ventajas de ser bilingüe?
Algunos estudios sostienen que los niños expuestos a varios idiomas son más creativos y desarrollan mejor las habilidades de resolución de problemas. Otros estudios sugieren que hablar un segundo idioma, aunque sólo sea durante los primeros años de vida, ayuda a programar los circuitos cerebrales para que sea más fácil para el niño aprender más idiomas en un futuro.
Algunos expertos afirman que si padres e hijos no hablan el mismo idioma en casa, la comunicación entre ellos podría debilitarse. El resultado: los padres podrían perder cierto control sobre sus hijos y, con el tiempo, éstos podrían recurrir a influencias negativas, como las patotas, para recuperar el sentido de pertenencia que ya no sienten en casa.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a ser bilingüe?
Existen varios métodos que pueden ayudarle a lograr que su hijo sea bilingüe. En todos ellos, es muy importante que los niños estén expuestos a ambos idiomas en diversos contextos y que entiendan la importancia de conocer cada uno de ellos.
Se recomiendan dos enfoques:
- El enfoque "un padre, un idioma" establece que cada padre hable un idioma diferente en casa desde los primeros años de vida del niño. Por ejemplo, la madre podría hablarle al niño sólo en inglés mientras el padre podría usar sólo el español.
- El método del "idioma minoritario en casa" permite a los padres establecer un uso para cada idioma. Por ejemplo, en casa sólo se hablaría español, mientras que en la escuela se hablaría inglés.
Con cualquiera de los métodos que utilice, trate de no mezclar los dos idiomas. Es decir, cuando hable con su hijo en el idioma de su herencia cultural, no mezcle el inglés en frases ni oraciones. Sin embargo, no se sorprenda si su hijo utiliza palabras de ambos idiomas en una oración. Cuando esto suceda, corríjale con indiferencia proporcionándole la palabra adecuada en el idioma que estén usando.
Existen muchos materiales que pueden ayudar a su hijo a aprender un segundo idioma. Estos son: CD-ROMs para la enseñanza de idiomas, videojuegos, videos y DVDs, CDs de música y muñecos electrónicos, entre otros. Los libros bilingües y los programas de dibujos animados en español como Clifford, el gran perro colorado, y Dora, la exploradora también son fáciles de encontrar. Y, claro, siempre está la Internet.
Cuando exponga a su hijo a un segundo idioma, no se olvide de sus aficiones. Por ejemplo, si a su hijo le gusta el fútbol, vean un partido en uno de los canales de habla hispana. Si a su hijo le gusta la música, busquen los últimos CDs de artistas que canten en inglés y en su idioma nativo.
Para niños pequeños, recurra a las rimas, canciones y juegos de su infancia. A medida que sus hijos crecen, sea persistente y creativo en su enfoque. Algunos padres envían a sus hijos a escuelas de idiomas para que aprendan la lengua de una manera más formal. Muchas familias también optan por enviar a sus hijos a pasar más tiempo con sus parientes en su tierra natal, ya sea sólo durante el verano o por más tiempo. No olvide que es importante tener amigos que también hablen un idioma por herencia cultural.
¿El bilingüismo conducirá a una pérdida cultural?
Probablemente se perderá algo de cultura y algunos vínculos si su hijo crece en un nuevo país; sin embargo, usted decide si quiere inculcar a sus hijos su herencia cultural o no.
Definitivamente, existe una cultura "americana". Sin embargo, no olvide que durante siglos, muchas de las personas que llegaron a los Estados Unidos en busca de un futuro más prometedor se aferraron a sus lenguas y culturas nativas en sus hogares y barrios; no obstante, aprendieron a hablar inglés y a integrarse en la vida estadounidense. Dichas identidades culturales aún existen en muchas familias después de muchas, muchas generaciones. Por ejemplo, encontramos un barrio italiano o chino en casi todas las ciudades principales de Estados Unidos. Y cada año, se celebran Mardi Gras, el Cinco de Mayo y el Día de San Patricio con igual entusiasmo.
Hablar con fluidez un segundo idioma puede conllevar grandes beneficios culturales. Los niños que aprenden el idioma de su herencia cultural pueden comunicarse con sus parientes y fortalecer los lazos familiares al otro lado de la frontera. Además, es muy probable que quieran aprender la historia y las tradiciones del país natal de su familia. Comprender de dónde proceden ayuda a los niños a desarrollar una fuerte identidad y a determinar hacia dónde se dirigirán en el futuro.
¿Retrasa el bilingüismo el desarrollo del habla de un niño?
En algunos casos, aprender dos idiomas simultáneamente puede enlentecer el desarrollo del lenguaje, en comparación con los niños monolingües. Los lingüistas afirman que los niños bilingües pueden invertir el orden de las palabras de una oración, pero al igual que los niños que hablan un solo idioma, entenderán lo que quieren decir. Asimismo, la corrección siempre debe ser sutil para que el niño no se inhiba.
Algunos padres temen que hablar a sus hijos en otro idioma dificultará el aprendizaje del inglés en la escuela. La realidad es que antes de que vayan a la escuela, los niños ya habrán estado en continuo contacto con el inglés gracias a la televisión, la radio y sus amigos. Los padres suelen asombrarse de la habilidad que tienen sus hijos para aprender inglés cuando juegan con otros niños angloparlantes en el barrio o en el preescolar. Una vez que comienzan a ir a la escuela, se ponen al nivel de sus compañeros rápidamente. Es entonces cuando el problema para los padres pasa a ser ¡cómo evitar que sus hijos hablen sólo inglés!
¿Cuáles son algunos de los retos?
Quizás a algunos chicos no les entusiasma mucho la idea de hablar el idioma de sus padres. Por naturaleza, los niños quieren ser como sus compañeros. Por ejemplo, si sus amigos hablan sólo inglés, ellos también quieren hablar sólo inglés. Los padres que quieren que sus hijos hablen un segundo idioma deben continuar hablándolo en casa, independientemente de la resistencia que puedan encontrar en sus hijos.
Educar a un niño para que sea bilingüe
Enseñar un segundo idioma a un niño puede suponer un reto. La realidad es que la mayoría de las familias inmigrantes pierden su idioma nativo en la tercera generación; pero éste no tiene por qué ser su caso.
En última instancia, la fluidez que tenga su hijo al hablar otro idioma estará influenciada por muchos factores, incluida la motivación personal y el apoyo por parte de los padres. Decida qué nivel desea que tenga su hijo del idioma de su herencia cultural y luego busque los recursos apropiados, como libros y material multimedia, educación formal o inmersión temporal.
Enseñar a los niños a ser bilingües puede ayudarles a reconocer la importancia de su cultura y herencia, así como a desarrollar una fuerte identidad personal e, incluso, ¡puede serles de gran utilidad en el trabajo cuando sean mayores!